La Medición en Higiene Ocupacional

Un Arte Fundamental para la Salud del Trabajador

Medir es, sin lugar a dudas, un arte, y en el ámbito de la Higiene Industrial, este arte se convierte en una herramienta esencial para la protección de la salud de los trabajadores.
La Higiene Industrial es una técnica que busca identificar y reconocer los factores o agentes presentes en los ambientes de trabajo.
Posteriormente, se procede a medir y valorar esos agentes para actuar de manera adecuada, con el objetivo de mantener sus niveles por debajo de los valores límite establecidos, evitando así la aparición de enfermedades profesionales a futuro.
Las enfermedades profesionales, entendidas como el deterioro paulatino de la salud debido a la exposición prolongada a condiciones de trabajo adversas o contaminantes, son uno de los riesgos más graves en el ámbito laboral.
De ahí la importancia de contar con un sistema eficiente de medición en higiene ocupacional, que permita identificar riesgos antes de que estos afecten a la salud del trabajador.

La Importancia de una Medición Correcta:

El proceso de medición en higiene ocupacional no es solo una cuestión técnica, sino que requiere una combinación de conocimientos, habilidades y competencias por parte del profesional encargado.
No basta con ser un profesional titulado en Higiene y Seguridad; es necesario contar con el entrenamiento adecuado para utilizar los instrumentos de medición y tener el criterio técnico suficiente para asegurar que las mediciones sean precisas y representativas de la realidad del entorno laboral.

Uno de los aspectos más cruciales en este campo es la selección del instrumento adecuado.
Muchos profesionales cometen el error de utilizar equipos no específicos o de baja precisión para medir agentes contaminantes.
Es importante recordar que los instrumentos utilizados en higiene ocupacional deben cumplir con estrictas normativas internacionales, como las Normas ISO, debido a la precisión que requieren las mediciones en cuestión.
Los valores obtenidos deben compararse con los límites de tolerancia del cuerpo humano, lo que implica que los equipos deben ser de alta calidad y precisión.
Esto explica, en parte, el elevado costo de estos instrumentos.

El Caso de los Decibelímetros: Una Lección en Precisión.

Un ejemplo claro de la diferencia entre una medición precisa y una aproximada lo encontramos en los decibelímetros. En la actualidad, es común ver aplicaciones móviles que prometen medir el nivel de ruido a través del teléfono móvil. Sin embargo, ¿Realmente reflejan estas mediciones la exposición al ruido en el entorno laboral? La respuesta es no. Existen diferencias sustanciales entre los valores de ruido obtenidos con un decibelímetro convencional y los valores representativos de la exposición real al ruido. Mientras que una aplicación puede medir los picos de sonido en un momento determinado, no es capaz de calcular el Nivel Sonoro Continuo Equivalente (NSCE) o la dosis total a la que está expuesto el trabajador a lo largo de su jornada. Es fundamental que los profesionales en higiene ocupacional utilicen equipos calibrados que permitan realizar mediciones continuas y acumulativas a lo largo del tiempo, ya que la dosis de exposición depende no solo de la intensidad del contaminante, sino también del tiempo durante el cual el trabajador está expuesto.

El Concepto de Dosis en Higiene Ocupacional: El concepto de dosis es esencial en la higiene ocupacional.

La dosis hace referencia a la cantidad de un agente contaminante al que está expuesto un trabajador, teniendo en cuenta no solo la concentración del contaminante, sino también el tiempo de exposición.
En este sentido, la medición no puede ser puntual ni aislada, ya que un solo valor no refleja la exposición real de un trabajador a lo largo de su jornada.
Es por esto que los protocolos de medición en higiene ocupacional especifican el tipo de medición que debe realizarse, ya sea puntual, parcial, consecutiva o durante un periodo total.
De esta manera, se asegura que la medición sea representativa y que se tenga en cuenta cualquier fluctuación o variación en las condiciones del ambiente de trabajo.

El Marco Normativo: Un Pilar en la Higiene Ocupacional.

Otro aspecto fundamental en la medición de agentes contaminantes en los ambientes laborales es el marco normativo que regula las concentraciones de estos agentes.
Los valores límite establecidos por las normativas nacionales e internacionales (como las de la OSHA o la ACGIH) son fundamentales para garantizar que los trabajadores no sufran daños a largo plazo debido a la exposición a condiciones de trabajo insalubres.

Estas normativas definen los niveles máximos de exposición para diferentes tipos de agentes contaminantes, considerando jornadas laborales de 8 horas, 4 horas o menos.
De esta manera, se establece la dosis permisible que puede incorporar el trabajador sin sufrir efectos adversos a su salud.
El cumplimiento de estos límites es crucial para prevenir enfermedades profesionales, y la medición precisa es el primer paso para garantizar que estos límites no sean superados.

La Acción Correctiva y Preventiva: De la Medición a la Protección.

Una vez que se realiza la medición, el siguiente paso es valorar los resultados obtenidos y actuar en consecuencia.
Si la medición muestra que los niveles de exposición están por debajo de los valores límite establecidos, se concluye que la condición del ambiente laboral es segura.
Sin embargo, siempre es recomendable implementar medidas preventivas para mejorar continuamente las condiciones de trabajo y evitar posibles riesgos a largo plazo.

En el caso de que los niveles de exposición excedan los valores permitidos, la condición se considera insegura y deben tomarse medidas correctivas de inmediato.
Estas medidas pueden incluir cambios en los procesos de trabajo, la implementación de equipos de protección personal, la mejora en la ventilación o incluso la modificación de las instalaciones.
Además, es crucial realizar un seguimiento continuo para verificar la eficacia de las medidas adoptadas y asegurarse de que los niveles de exposición se mantengan dentro de los límites establecidos.

Conclusión:

La medición en Higiene Ocupacional es mucho más que un simple procedimiento técnico.
Es un proceso que implica una comprensión profunda de los agentes contaminantes, la selección adecuada de instrumentos, el conocimiento de los protocolos de medición y la aplicación rigurosa de normativas.
Los profesionales en este campo deben estar capacitados no solo para realizar las mediciones de manera correcta, sino también para interpretar los resultados y tomar decisiones basadas en ellos.

La medición precisa y conforme a normativas internacionales es fundamental para garantizar que los trabajadores no estén expuestos a riesgos que puedan afectar su salud a largo plazo.
En última instancia, el objetivo de la Higiene Ocupacional es proteger la salud del trabajador, previniendo enfermedades profesionales y asegurando ambientes de trabajo seguros.
Para ello, es imprescindible invertir en equipos de medición de alta precisión y seguir los protocolos adecuados que garanticen la validez de los resultados obtenidos.


Colaborador en la nota:

Mariano Mendez

Mariano Mendez
consultor independiente de Higiene y Seguridad, influencer en Instagram, coordinador de la carrera de Higiene y Seguridad en la Universidad provincial de Ezeiza

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